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miércoles, 19 de marzo de 2014

La Devaluación de las Palabras



Nuestras almas están unidas a nuestra tierra, a nuestro país, fundidas en una sola masa de vida que nos rodea. Estamos en la sabana y playas; en los médanos y castillos. Somos cada rincón, cada ser, cada gramo de vida. Es por eso que nuestro país nos duele. Es por eso que sangramos y morimos con y por el…, o mejor dicho por ella, pues muchos pensamos que nuestra Venezuela es una hermosa mujer, vestida de orquídeas y bañada de cultura. Y si “Ella” sufre nosotros sufrimos; si ella muere morimos con ella; siendo del bando que seamos, rojos o tricolores, somos de la misma tierra y nuestras almas le pertenecen a Venezuela por siempre. Es nuestra vida y será nuestro cementerio, para bien o para mal.


Más de un mes ya ha pasado desde el inicio de tanto dolor y angustia. Más de veinte muertos contamos (oficialmente) y tal parece que la palabra “Paz” se devalúa como nuestra moneda; más de veinte muertos cuyos cuerpos aun esperan justicia. Siguen las lágrimas en nuestra Venezuela y parece haber más impotencia que arroz y leche en las calles. Pero ha sido más de una década donde las siguientes preguntas no paraban de aparecer en cada una de nuestras preocupadas mentes: ¿Qué será de nosotros? ¿Pasarán años? ¿Pasarán meses? ¿Faltará mucho o faltará poco?..., lo cierto es que a pesar de la humillación, del dolor, del miedo y de la gran cantidad de injusticias que vemos todos los días en las calles sucias de nuestra sociedad, hay más ganas de  la juventud de salir a las calles y hacerse notar; todo para hacer ver a nuestro gobierno lo mal que está su sistema y lo furioso que está su pueblo. Pero sabemos que entre tanta furia se oculta el miedo a que nada cambie.

El gobierno ante todo sigue con la misma visión del país, o por lo menos así se ha hecho ver a lo largo de estas jornadas de muerte y guarimbas. Ven a los estudiantes como terroristas modernos y como los malcriados que no siguen las reglas.

El régimen ha seguido los patrones del disco rayao’: de que hay que conformarse, de que ellos no tienen la culpa de absolutamente nada… sabotaje, Obama, infiltrados, fascistas burgueses, Colombia, Panamá…, Todos parecen tener la culpa de nuestros males menos nuestros propios gobernantes. El MUNDO ENTERO… no … EL UNIVERSO COMPLETO está en contra de Venezuela y sus planes de ser el mejor país jamás existido, según la mentalidad chavista de nuestro presidente. ¿Por qué eso sigue teniendo sentido para los que aun apoyan al heredero de Hugo Chávez? ¿Qué acaso no se dan cuenta de que nuestra calidad de vida ha desaparecido años atrás? Es aquí donde nos preguntamos si el significado de “calidad” y de lo que quiere decir “vida” fueron implantados correctamente.

Chavez nos dejó un legado enorme antes de morir: un ejército de Robo-Zombies programados para seguir un patrón de mediocridad en un ciclo infinito de destrozos y pobreza de cultura, pobreza de razonamiento y extrema pereza hacia una mentalidad de que se puede estar mejor. El pueblo conformista que Chávez le dejó a Maduro es tan ridículo como todas sus erróneas doctrinas, pero es esa masa la que le da fuerza y poder a sus palabras. “Mientras menos sepa el pueblo, mejor”.

La devaluación de las palabras, según creo, viene incorporada a la manipulación de la comunicación, a las formas “agradables” en que el gobierno se expresa hacia su gente. Donde muchos optan por filtrar lo ineficiente y quedarse con la realidad de los hechos, mientras a otros les provoca una desgana al uso de razón, o simplemente todo suena tan bonito que aplauden y decodifican la información en sus cerebros a su manera. Esta última característica puede que la tengan muchos chavistas. Y estos principios son importantes si se quiere atraer a un público ignorante.

El lavado cerebral lo comenzó Chávez y se continúa haciendo descaradamente. Care´tabla, es como nosotros nos expresamos de este hecho en ocasiones; refiriéndonos a su vez al cinismo entre cada mentira. Chavez trabajó duro para darle la vuelta al diccionario a su favor, y es curioso ver como el gobierno fue capaz de cambiar el valor y significado literal de las palabras de nuestra amada lengua; Chavez preparó lo que yo llamé  “El Gran Diccionario de la Real Academia de la Mediocridad” para esparcirlo por su pueblo y obligar a estudiarlo a nivel nacional por años. Han acusado a la oposición de “satanizarlos” cuando ellos han implantado tanto odio en su gente, odio que el régimen siempre usó a su favor.

Hoy en día vemos las consecuencias de tanto engaño. La PAZ ya no es paz, es más balas y menos comprensión; el DIÁLOGO y la ARGUMENTACIÓN ya no son las defensas de nuestros ideales, se han transformado en  escucha lo que tengo que decir y confórmate con lo que tengo que darte; el FASCISTA ya no es un tirano sino alguien que siente dolor por su tierra y que quiere que florezca como debe y merece, que su gente esté llena de alegrías, que haya seguridad en las calles y justicia;  el APÁTRIDA es el que se opone a las ideas del gobierno. Los ESTUDIANTES pasamos a ser criminales, terroristas; dejamos de ser el símbolo supremo de la intelectualidad y del futuro; nos hemos vuelto una burla para el régimen aunque ahora somos guerreros ante el mundo.

¿Y los MÁRTIRES? Fantasmas denigrados por su gobierno, pero no por su gente.

¿Y Maduro? Bien, gracias; durmiendo feliz como un bebé. (son sus palabras)

¿Hasta cuándo tanta ignorancia? ¿Cómo es que algunos de los devotos al gobierno no se dan cuenta de nada? ¿Han perdido la capacidad de razonamiento o es que nunca la tuvieron? Está claro que la generación que creyó las palabras “honestas” de Chavez condenó a Venezuela y a todas sus almas a lo que hoy en día sufren. El país está cosechando vegetales podridos y está en nuestras manos quemar el campo entero si es necesario para volver a sacarle provecho a la tierra. Llegará el día en que las personas dejen de creer en significados erróneos y en ideologías que no nos llevan a ninguna parte… o más bien, sí nos conducen a un lugar pero cuesta pensar que podamos estar peor en el futuro, y es por lo doloroso que es.

La CALLE se ha vuelto un sinónimo de terror pero a la vez de fortaleza y estamos dando los pasos hacia la libertad que queremos. Yo sólo espero que el fin de todo esté cerca. Yo sólo espero que éste sea el inicio de la VERDADERA REVOLUCIÓN que necesitamos.

Estamos hundidos en mentiras pero la verdad nos guiará hasta la libertad. Y les daremos de nuevo el significado a cada palabra destruida por el régimen. La PAZ volverá a ser lo que era y la VIDA tendrá sentido de nuevo.


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